Con profunda tristeza participamos el fallecimiento de nuestra querida amiga y profesora de la cátedra, Andrea Krikun. Andrea amaba la literatura y era feliz dando clases en la universidad. Era también una mujer comprometida en las luchas del feminismo y de la docencia en escuelas públicas. Durante quince años, desde los Prácticos fue parte muy importante del crecimiento de esta cátedra, aportando ideas, haciendo traducciones, analizando textos con lucidez y sobre todo poniendo el alma en cada clase. Fue una compañera generosa y solidaria. En los últimos años luchó con entereza por recuperar su salud, siempre con una sonrisa. Ya la estamos extrañando, y estas palabras no le hacen justicia al dolor que nos produce su pérdida. No hay consuelo cuando muere gente hermosa antes de poder dar todo lo que tenían para dar. Agradecemos que Andrea haya sido parte de nuestras vidas, pero queríamos más.
Acompañamos en este momento a sus hijos, su pareja, amigos, colegas, alumnos y ex alumnos.
Gabriel Matelo, Patricia Lozano y Martín Castagnet
Abrazos a la cátedra, de parte de una alumna que tiene un bello recuerdo de Andrea. Es cierto, no hay consuelo.
ResponderEliminarAbrazos a la catedra, compañerxs, y familia. Gran docente, una persona muy inspiradora. Se la recuerda con mucho cariño.
ResponderEliminarAbrazos a la cátedra. Recuerdo a la profe con mucho amor. Espero que puedan mejorarse pronto.
ResponderEliminarEstoy muy triste por Andrea, en clase tan amorosa, tan cercana, hablaba con todos. Era hermosa. Militaba por todos lados: profe universitaria, profe de secundaria, feminista,muy comprometida. La vamos a extrañar!
ResponderEliminarGracias y toda la luz de Andrea por siempre en la cátedra. Recuerdo cursar literatura norteamericana cuando mi abuela fallece, y Andre tenia toda ese impulso contagioso de vivir y darle . GRACIAS
ResponderEliminarMuchas gracias, queridxs! Un gran abrazo!
ResponderEliminarTuve la suerte de ser su alumna en el año 2009. Disfrutaba enormemente sus clases, su pasión era contagiosa, y con su paciencia y generosidad lograba que las tímidas como una nos animáramos a participar y compartir. Es una de las profes que voy a recordar siempre.
ResponderEliminarUn abrazo grande a la gente de la cátedra y a sus seres queridos. Profundamente apenado por este suceso. Andrea, al menos un pedacito de ella, vive en el alma de esta hermosa materia. Siempre será recordada con amor y agradecimiento hacia su labor docente
ResponderEliminarAcabo de enterarme de esta triste e inesperada noticia, desde la virtualidad se notaba su dedicación y pasión por la literatura, un amor de persona que desde un video te hacía sentir muy acompañada. Besos al cielo y abrazo enorme para toda la cátedra,
ResponderEliminarlo lamento mucho.